En los últimos años, muchos editores de revistas científicas han descubierto el atractivo de publicar números especiales, dado que permiten tratar temas emergentes, atraer a nuevos autores y generar visibilidad en áreas específicas. Estas colecciones temáticas, editados por académicos invitados (que a veces son ellos mismos quienes los proponen), se han convertido en una práctica editorial habitual.
Pero, con el aumento de su uso, también se ha incrementado el número de irregularidades. Los fraudes en la revisión por pares, los conflictos de interés no declarados y las colecciones enteras comprometidas por malas prácticas han encendido las alarmas en el sector editorial científico. En respuesta, el Comité de Ética en Publicación (COPE, en inglés) ha publicado en julio de 2025 una guía oficial titulada: “Guest Edited Collections: Guidelines for Editors and Publishers”1. Este documento ofrece criterios fundamentales para gestionar los números especiales con transparencia y responsabilidad.
Aquí explico esas las recomendaciones esenciales que todo editor, sea de una revista grande o pequeña, debería conocer.
¿Qué son los números especiales en las revistas científicas?
Los números especiales son agrupaciones de artículos que giran en torno a una temática concreta dentro del ámbito de la revista. Estos números están gestionadas por editores invitados que, en su mayoría, son académicos ajenos al equipo editorial permanente. Estos editores invitados son los encargados de proponer el tema, convocar a los autores, coordinar la revisión por pares y participar en las decisiones editoriales. A menudo, estas colecciones temáticas surgen por iniciativa de los propios investigadores, aunque también pueden encargarse desde la revista.
COPE reconoce que las colecciones pueden ser valiosas, debido a que fomentan la colaboración en nichos específicos, permiten visibilizar líneas de investigación novedosas y abren espacio a voces diversas. No obstante, también advierte de que, si no se gestionan con rigor, pueden convertirse en espacios vulnerables para prácticas poco éticas.
Principales riesgos en la gestión de números especiales
COPE identifica seis tipos de riesgos particularmente frecuentes en la gestión de los números especiales. Estos no solo afectan a artículos individuales, sino que pueden comprometer la integridad de toda la colección, e incluso la revista en sí.
- Fraude en la revisión por pares: algunas prácticas incluyen falsificar identidades de revisores, usar correos electrónicos falsos o permitir que autores o colegas revisen sus propios trabajos. Esto daña por completo la credibilidad del proceso editorial.
- Suplantación de identidad: personas pueden hacerse pasar por investigadores reales o usar perfiles falsificados para actuar como autores, revisores o editores invitados. COPE recomienda verificar identidades mediante perfiles ORCID o páginas institucionales verificables.
- Participación de “paper mills”: las llamadas “fábricas de artículos” elaboran manuscritos por encargo para investigadores que buscan publicar rápidamente. Estas organizaciones suelen aprovechar los números especiales como canales menos controlados.
- Manipulación de autorías: se han detectado esquemas en los que se ofrece incluir a alguien como coautor a cambio de dinero o de pagar los APC.
- Cárteles de citación y autocitas excesivas: grupos de autores o editores que se citan entre sí de manera coordinada para inflar métricas. Esto puede incluir presiones a los autores para que citen artículos del editor invitado o de su red.
- Comisionamiento sesgado o cerrado: algunas colecciones se convierten en espacios para grupos reducidos, donde solo se invitan colaboradores cercanos. Esto va en contra de la diversidad de perspectivas y puede reflejar conflictos de interés.
¿Qué deben hacer las revistas científicas ante la gestión de números especiales?
El mensaje central de COPE es claro: las colecciones editadas por invitados deben regirse por las mismas normas éticas que cualquier otro contenido de la revista. Esto implica vigilancia, transparencia, controles y, sobre todo, una distribución clara de las responsabilidades. COPE subraya que el editor jefe y el equipo editorial permanente no pueden eludir su función, aunque sea otra persona quien gestione la colección.
Un primer paso fundamental consiste en definir políticas claras sobre números especiales y publicarlas en el sitio web de la revista. La guía de COPE hace hincapié en este aspecto en varias ocasiones: los roles, las responsabilidades, los criterios de revisión, los requisitos de transparencia y los conflictos de interés deben estar disponibles públicamente, no solo en documentos internos o correos privados. La ausencia de estas políticas expone a la revista a riesgos innecesarios y a la pérdida de confianza por parte de lectores, autores y evaluadores.
Buenas prácticas recomendadas
COPE propone varias estrategias para mitigar riesgos a la hora de gestionar números especiales. Entre ellas destaca la necesidad de establecer un proceso formal y documentado para evaluar propuestas de dichos números. Esto incluye:
- Verificar los antecedentes y experiencia editorial de los posibles editores invitados.
- Asegurarse de que no tengan historial de conductas poco éticas (como retractaciones o vínculos con paper mills).
- Explicar detalladamente sus funciones, el tiempo que requerirá su participación y los límites de su autoridad.
- Revisar posibles conflictos de interés, por ejemplo, si también editan otra revista que compite por los mismos artículos.
- Establecer claramente que las decisiones finales siguen en manos del editor en jefe o un editor académico permanente.
Otra recomendación es limitar el número de colecciones que la revista acepta simultáneamente, especialmente si no se cuenta con personal suficiente para supervisarlas adecuadamente. No se trata de frenar el crecimiento, sino de mantenerlo bajo control y evitar que la cantidad sacrifique la calidad editorial.
Además, COPE anima a las revistas a auditar periódicamente el contenido y los procesos de revisión de sus colecciones. Esto incluye verificar la cantidad de artículos revisados por cada editor, los tiempos de revisión, la calidad de los informes y las relaciones entre autores, revisores y editores.
Transparencia desde el inicio
Uno de los errores más comunes es dar por hecho que un editor invitado conoce el modelo editorial y los principios de la revista. COPE recomienda no dar nada por sentado y explicar todo por escrito y de forma clara desde el principio. El editor invitado debe firmar una carta o acuerdo en la que se comprometa a respetar las políticas éticas, el modelo de revisión y la línea editorial.
También se debe aclarar el modelo económico. Si hay cobros por publicación (APC), los editores invitados deben ser informados y transmitir esta información a los autores de manera transparente. La concesión de exenciones no puede utilizarse como “gancho” para atraer colaboraciones si no está contemplada en las políticas de la revista.
Conclusión: profesionalizar sin improvisar
Los números especiales seguirán siendo parte del ecosistema editorial y, si se gestionan adecuadamente, son una herramienta muy valiosa. Pero, hoy más que nunca, se requiere profesionalidad, controles claros y políticas transparentes. Como editores, es nuestra responsabilidad proteger la revista de prácticas que puedan comprometer su integridad.
Establecer políticas públicas claras, auditar regularmente los procesos y mantener la supervisión editorial activa son las claves para que las colecciones temáticas contribuyan al prestigio y no al descrédito de la publicación.
Referencias
1COPE Council. COPE Guidelines: Guest Edited Collections – English. https://doi.org/10.24318/Bp64sd1c



